Las incógnitas sin resolver del ovni de Manises que forzó el aterrizaje de emergencia de un avión
El suceso de la noche del 11 de noviembre en el aeropuerto valenciano llegó al Congreso y el Ministerio de Defensa nunca pudo aclararlo
ALBERTO CAPARRÓS
«Un Mirage F-1 de reconocimiento de 141 Escuadrón del Ejército del Aire intentó la interceptación del ovni varias veces. Sin embargo, el desconocido aparato se mantuvo siempre a distancia del caza militar, a pesar de que este tipo de aviones pueden alcanzar 2.300 kilómetros por hora». La Hemeroteca de ABC guarda la crónica que firmó Alfredo Semprún Guillén el 13 de noviembre de 1979 que daba cuenta de que un avión había tenido que aterrizar de emergencia en el aeropuerto de Manises a causa de un ovni .
Lo que pasó en Valencia aquella noche de noviembre de 1979 todavía continúa siendo una incógnita. Entonces, un avión «Super Caravelle» de la compañía TAE -Trabajos Aéreos y Enlaces- tuvo que desviar su rumbo al toparse con dos grandes luces rojas y practicó un aterrizaje de emergencia en Manises.
Modelo extinto del avión que avistó el ovni de Manises
El vuelo JK-297 cubría la ruta Palma de Mallorca-Tenerife . El avistamiento se produjo en la zona entre Ibiza y Alicante. Entonces, el piloto, Francisco Javier Lerdo de Tejada, dio la voz de alarma: «Es mucho más rápido que nosotros y se acerca cada vez más. ¡Me voy para Valencia!».
«Es mucho más rápido que nosotros y se acerca cada vez más. ¡Me voy para Valencia!»
Preguntado por el periodista de ABC sobre si aquello se trataba de un ovni, el comandante del avión respondío que «solo se que era un aparato endiabladamente veloz y con una capacidad de maniobra asombrosa».
Al igual que ha sucedido ahora en los Estados Unidos , el caso del ovni de Manises llegó al Congreso de los Diputados en España en la década de los ochenta del siglo pasado. Enrique Múgica, entonces diputado del PSOE, preguntó en septiembre de 1980 por el suceso, considerado el principal hito de la ufología en la historia de España.
El Ministerio de Defensa, que llegó a desplegar un caza la noche del avistamiento , se limitó a asegurar en el informe sobre el caso que el tráfico desconocido que obligó al vuelo JK-297 a aterrizar de emergencia en el aeropuerto de Manises era de procedencia indeterminada.
Cuatro décadas después las incógnitas siguen abiertas . La posible explicación a aquel suceso va desde que aquello que vio el piloto Lerdo de Tejada no fuera un ovni si no astros nocturnos o fenómenos meteorológicos o llamaradas de las torres de combustión de la refinería de Escombreras, en la localidad murciana de Cartagena. Otras teorías apuntan a las maniobras de un portaaviones de la Armada estadounidense en el Mediterráneo y que uno de sus cazas fuera confundido con un ovni.
El vuelo JK-297 cubría la ruta Palma de Mallorca-Tenerife . El avistamiento se produjo en la zona entre Ibiza y Alicante. Entonces, el piloto, Francisco Javier Lerdo de Tejada, dio la voz de alarma: «Es mucho más rápido que nosotros y se acerca cada vez más. ¡Me voy para Valencia!».
«Es mucho más rápido que nosotros y se acerca cada vez más. ¡Me voy para Valencia!»
Preguntado por el periodista de ABC sobre si aquello se trataba de un ovni, el comandante del avión respondío que «solo se que era un aparato endiabladamente veloz y con una capacidad de maniobra asombrosa».
Al igual que ha sucedido ahora en los Estados Unidos , el caso del ovni de Manises llegó al Congreso de los Diputados en España en la década de los ochenta del siglo pasado. Enrique Múgica, entonces diputado del PSOE, preguntó en septiembre de 1980 por el suceso, considerado el principal hito de la ufología en la historia de España.
El Ministerio de Defensa, que llegó a desplegar un caza la noche del avistamiento , se limitó a asegurar en el informe sobre el caso que el tráfico desconocido que obligó al vuelo JK-297 a aterrizar de emergencia en el aeropuerto de Manises era de procedencia indeterminada.
Cuatro décadas después las incógnitas siguen abiertas . La posible explicación a aquel suceso va desde que aquello que vio el piloto Lerdo de Tejada no fuera un ovni si no astros nocturnos o fenómenos meteorológicos o llamaradas de las torres de combustión de la refinería de Escombreras, en la localidad murciana de Cartagena. Otras teorías apuntan a las maniobras de un portaaviones de la Armada estadounidense en el Mediterráneo y que uno de sus cazas fuera confundido con un ovni.
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